Carta del editor a los colegas y a la comunidad
¿Por qué Domingazo?
Domingazo es una revista que nace inspirada en la problemática del Hospital Domingo Funes, en el Departamento Punillla de la Provincia de Córdoba. Intentará ser un puente de intercambio de ideas entre los que están trabajando desde adentro y los que desde afuera buscan soluciones. Un nexo impreso entre hospital y hospital, entre hospital y comunidad, entre servicio y servicio, entre nosotros mismos.
También servirá como medio de difusión, discusión y reflexión de la problemática hospitalaria real, la que sufrimos todos, todos los días, sin presentarla hipócritamente.
Por eso, intentaremos generar un espacio para la discusión constructiva de un marco que nos permita volver a pensar a la salud pública como un medio para superarnos como personas y sociedad, y no como un lugar de corrupción, estancamiento y desengaño.
Tampoco nos interesa obtener rédito político ni estamos afiliados a ningún partido, por lo que nos sentimos identificados con todo aquel que tenga la intención franca de empujar hacia adelante. Nuestro verdadero interés es lograr que el derecho a la salud en la Argentina no sea solo retórico. Pero para ello, consideramos que debemos unirnos y comenzar a mirar lo que no queremos ver.
Estamos parados sobre la ruina de un sistema que en el pasado fue de excelencia, pero debemos ser concientes de que hoy, ya no lo es.
Tenemos el tremendo desafío de empezar de cero y de todos los que en verdad defendemos el hospital público, depende que lleguemos a buen puerto.
Empezar de cero implica comprometernos, llamar a las cosas por su nombre, y defender lo que creemos con toda nuestra energía, para construir un futuro digno para todos. Por eso esperamos ideas, denuncias, problemas, proyectos y también buenas noticias.
Domingazo es una revista en blanco y negro, realizada con cero presupuesto y no financiada con publicidad comercial, lo que le brinda independencia. Por lo tanto No va a quedarse contando una situación color de rosa, cuando todos sabemos muy bien que la rosa se marchitó hace mucho tiempo.
Mariano Emilio Iosa
Presidente Fundación Deuda Interna
emilioiosa@deudainterna.org
¿Por qué Domingazo?
Domingazo es una revista que nace inspirada en la problemática del Hospital Domingo Funes, en el Departamento Punillla de la Provincia de Córdoba. Intentará ser un puente de intercambio de ideas entre los que están trabajando desde adentro y los que desde afuera buscan soluciones. Un nexo impreso entre hospital y hospital, entre hospital y comunidad, entre servicio y servicio, entre nosotros mismos.
También servirá como medio de difusión, discusión y reflexión de la problemática hospitalaria real, la que sufrimos todos, todos los días, sin presentarla hipócritamente.
Por eso, intentaremos generar un espacio para la discusión constructiva de un marco que nos permita volver a pensar a la salud pública como un medio para superarnos como personas y sociedad, y no como un lugar de corrupción, estancamiento y desengaño.
Tampoco nos interesa obtener rédito político ni estamos afiliados a ningún partido, por lo que nos sentimos identificados con todo aquel que tenga la intención franca de empujar hacia adelante. Nuestro verdadero interés es lograr que el derecho a la salud en la Argentina no sea solo retórico. Pero para ello, consideramos que debemos unirnos y comenzar a mirar lo que no queremos ver.
Estamos parados sobre la ruina de un sistema que en el pasado fue de excelencia, pero debemos ser concientes de que hoy, ya no lo es.
Tenemos el tremendo desafío de empezar de cero y de todos los que en verdad defendemos el hospital público, depende que lleguemos a buen puerto.
Empezar de cero implica comprometernos, llamar a las cosas por su nombre, y defender lo que creemos con toda nuestra energía, para construir un futuro digno para todos. Por eso esperamos ideas, denuncias, problemas, proyectos y también buenas noticias.
Domingazo es una revista en blanco y negro, realizada con cero presupuesto y no financiada con publicidad comercial, lo que le brinda independencia. Por lo tanto No va a quedarse contando una situación color de rosa, cuando todos sabemos muy bien que la rosa se marchitó hace mucho tiempo.
Mariano Emilio Iosa
Presidente Fundación Deuda Interna
emilioiosa@deudainterna.org
1) Entrevista Dr. José Luis Fitó (año 2006)
Director del Hospital Psiquiátrico Colonia Santa María.
Texto del Vídeo que obtuvo el Premio Fundación Ciencia para la Vida en el VI Festival Internacional de Cine Médico y Científico Videomed Córdoba 2007.
¿Por qué eligió medicina?
Yo ingresé a la universidad en el año 64. Medicina me pareció como una de las carreras que más se acercaban a la comprensión del ser. Lo que todavía no me había dado cuenta era de la diferencia entre la medicina clásica, la que uno conoce en la vida cotidiana como paciente, y lo que después terminé haciendo cuando llegué a cuarto año y me di cuenta que siempre me faltaba una pata en la sota entonces ahí nomás me agregué en la famosa Escuela del Clínicas y empecé a estudiar psicopatología y ya tenía decidido que iba a hacer psiquiatría.
¿Por qué psiquiatría?
Me faltaba básicamente la pata de lo psicológico específicamente del paciente y…(La escuela del clínicas) me hizo entender que la psicología tampoco alcanzaba, que faltaba la otra pata que eran los aspectos sociales de la enfermedad…
Y decidí que iba a hacer psiquiatría y que me iba a dedicar a eso que había descubierto pasada la mitad de la carrera. No se olviden que medicina sanitaria en esa época aparecía en sexto año. Nosotros entrábamos por el hígado y terminábamos sabiendo los aspectos sociales del alcoholismo cuando nos estábamos egresando. A mí me tocó una universidad…yo egresé en el año 71, con la típica carrera centrada en el estudio del órgano, no del estudio del paciente, y del estudio del órgano fuera de todo contexto, es decir, lo que era muy importante, era saber qué era la cirrosis, que lesiones producía macro y microscópicas, y qué alternativas de tratamiento ofrecía la clínica en ese momento. Eso era lo que había que saber. Con eso uno ya era médico. Creo que las cosas han cambiado un poco… no se si todo lo necesario.
¿Qué significó para Ud. haber sido residente del Hospital Santa María?
Para mí fue algo extraordinario Fue la primera vez en mi vida que me pagaron por estudiar. Eso yo se lo agradezco al Estado, se lo agradezco al sistema de salud. Esto de llegar a ser residente fue como un premio al esfuerzo, al esfuerzo de haber trabajado siempre, en otras actividades no en la medicina, de haberme podido graduar y de poder hacer lo que yo quería hacer. En una época además que este Hospital tenía un esplendor y un desarrollo digno de mencionarse. Este hospital trabajaba con los sistemas más modernos de la psiquiatría social, tal era la asamblea comunitaria, los grupos terapéuticos, con personal entrenado, con un médico inglés que vino y se instaló en el hospital… y que se llevó algunos residentes…
¿Usted por qué no se fue?
Yo me resistí a irme. Me parecía apasionante la idea de quedarme a hacer algo en salud acá. Traté siempre de quedarme, de quedarme a hacer cosas. Después me fui pero no por elección propia. (El Dr. José Luis Fitó Estuvo exiliado en Venezuela)
¿Sus grandes logros?
Los grandes logros son los logros de todos los días. No me gustaría hablar de mis grandes logros… me gustaría hablar del logro de todos los días. Desde la atención de un paciente, desde la satisfacción de una tarea bien realizada, que no siempre sale como uno quiere… hasta la presentación de un trabajo de investigación que sea bien recibido por la gente que lo escucha, que sea apreciado, que sea discutido… Los logros para mí empiezan a las siete de la mañana todos los días y terminan a las diez de la noche… No se cuáles serían los grandes y los pequeños, yo no los califico en grandes y pequeños. Los califico como satisfactorios o no. Hay días que puedo irme a dormir satisfecho, y eso me molesta muchísimo. O sea que trato de irme a dormir satisfecho a la noche.
¿Sus frustraciones?
Sí he tenido… tampoco han sido ni grandes ni pequeñas, han sido frustraciones, y como toda frustración deja las cicatrices en el cuerpo. De no ser comprendido en mis posiciones, que se interpretara que había alguna doblez en lo que estaba proponiendo, cuando no es mi característica. Mi característica es más de franqueza, de ir de frente, lo que me ha causado muchos problemas pero no frustraciones. De que el sistema nunca terminara de cerrar en algún punto… o que cuando se han obtenido logros después se retrocede, por todo el entorno socioeconómico del país. Me he sentido frustrado a veces con algunas personas que he conocido del entorno del trabajo, de la especialidad, de los colegios, de los consejos… que uno los veía como líderes de un proceso de evolución y terminaron traicionando todo lo logrado, y dando vuelta todo hacia atrás, regresando a épocas terribles.
Me he sentido frustrado con el nivel de estudios en la Universidad. Uno va con esa ilusión a la Universidad que se va a formar y va a salir “preparado para”. Yo creo que sale preparado para… para seguir luchando, en la formación personal, profesional, política, ideológica, el estudio de los sistemas sanitarios… La frustración es que uno creía que se recibía y era médico.
Médico de título. Médico no se termina de ser nunca. Hasta que uno abandone esta tarea.
Esas son frustraciones… fundamentalmente lo que yo llamo las traiciones. No las traiciones políticas. La política lleva en sí misma la traición, además sistematizada desde Maquiabelo. Hasta hay tratados para traicionar. Lo que mas me ha frustrado y me ha puesto muy mal, han sido las traiciones ideológicas, que no son patrimonio de nadie en política y son patrimonio de todos los sectores políticos. Esas sí me han marcado, me han marcado muy fuerte.
¿Por qué acepta el cargo de Director del Hospital Colonia Santa María?
Lo acepto porque me parece que es un momento en el que hay como una necesidad de la institución de varias cosas. Una es que esta institución tenga un director que sea de la institución.
Este hospital lleva años que no tiene (salvo un episodio menor de alguien que tuvo que asumir apresuradamente la dirección y que se fue apresuradamente) un director que sea de la institución. Y a pesar de que yo no estaba acá me siento parte de la institución. La idea es que la gente se prepare para ser director del hospital y que haga su recorrido muy cerca de la gestión de la dirección. Yo espero que uno de los logros sea que el Director sea de la institución. Y cuando digo sea, no digo solamente que trabaje en la institución, sino que tenga la camiseta, como se dice vulgarmente, puesta de la institución.
Por ejemplo, yo he destituido todos los cargos internos de la institución de jefe de servicio, a todas las personas que no vienen a trabajar todos los días. Los que vienen dos veces o tres veces por semana y trabajan en otro lado… No. No. Acá las personas que se hacen cargo de los servicios tienen que ser personas que estén acá de lunes a viernes. En eso soy implacable. Porque uno no puede dirigir una institución viniendo tres veces por semana, ni un servicio, ni nada… Uno para dirigir un servicio tiene que estar. Bueno eso. Básicamente que esté.
¿Cómo ve la psiquiatría actual?
Texto del Vídeo que obtuvo el Premio Fundación Ciencia para la Vida en el VI Festival Internacional de Cine Médico y Científico Videomed Córdoba 2007.
¿Por qué eligió medicina?
Yo ingresé a la universidad en el año 64. Medicina me pareció como una de las carreras que más se acercaban a la comprensión del ser. Lo que todavía no me había dado cuenta era de la diferencia entre la medicina clásica, la que uno conoce en la vida cotidiana como paciente, y lo que después terminé haciendo cuando llegué a cuarto año y me di cuenta que siempre me faltaba una pata en la sota entonces ahí nomás me agregué en la famosa Escuela del Clínicas y empecé a estudiar psicopatología y ya tenía decidido que iba a hacer psiquiatría.
¿Por qué psiquiatría?
Me faltaba básicamente la pata de lo psicológico específicamente del paciente y…(La escuela del clínicas) me hizo entender que la psicología tampoco alcanzaba, que faltaba la otra pata que eran los aspectos sociales de la enfermedad…
Y decidí que iba a hacer psiquiatría y que me iba a dedicar a eso que había descubierto pasada la mitad de la carrera. No se olviden que medicina sanitaria en esa época aparecía en sexto año. Nosotros entrábamos por el hígado y terminábamos sabiendo los aspectos sociales del alcoholismo cuando nos estábamos egresando. A mí me tocó una universidad…yo egresé en el año 71, con la típica carrera centrada en el estudio del órgano, no del estudio del paciente, y del estudio del órgano fuera de todo contexto, es decir, lo que era muy importante, era saber qué era la cirrosis, que lesiones producía macro y microscópicas, y qué alternativas de tratamiento ofrecía la clínica en ese momento. Eso era lo que había que saber. Con eso uno ya era médico. Creo que las cosas han cambiado un poco… no se si todo lo necesario.
¿Qué significó para Ud. haber sido residente del Hospital Santa María?
Para mí fue algo extraordinario Fue la primera vez en mi vida que me pagaron por estudiar. Eso yo se lo agradezco al Estado, se lo agradezco al sistema de salud. Esto de llegar a ser residente fue como un premio al esfuerzo, al esfuerzo de haber trabajado siempre, en otras actividades no en la medicina, de haberme podido graduar y de poder hacer lo que yo quería hacer. En una época además que este Hospital tenía un esplendor y un desarrollo digno de mencionarse. Este hospital trabajaba con los sistemas más modernos de la psiquiatría social, tal era la asamblea comunitaria, los grupos terapéuticos, con personal entrenado, con un médico inglés que vino y se instaló en el hospital… y que se llevó algunos residentes…
¿Usted por qué no se fue?
Yo me resistí a irme. Me parecía apasionante la idea de quedarme a hacer algo en salud acá. Traté siempre de quedarme, de quedarme a hacer cosas. Después me fui pero no por elección propia. (El Dr. José Luis Fitó Estuvo exiliado en Venezuela)
¿Sus grandes logros?
Los grandes logros son los logros de todos los días. No me gustaría hablar de mis grandes logros… me gustaría hablar del logro de todos los días. Desde la atención de un paciente, desde la satisfacción de una tarea bien realizada, que no siempre sale como uno quiere… hasta la presentación de un trabajo de investigación que sea bien recibido por la gente que lo escucha, que sea apreciado, que sea discutido… Los logros para mí empiezan a las siete de la mañana todos los días y terminan a las diez de la noche… No se cuáles serían los grandes y los pequeños, yo no los califico en grandes y pequeños. Los califico como satisfactorios o no. Hay días que puedo irme a dormir satisfecho, y eso me molesta muchísimo. O sea que trato de irme a dormir satisfecho a la noche.
¿Sus frustraciones?
Sí he tenido… tampoco han sido ni grandes ni pequeñas, han sido frustraciones, y como toda frustración deja las cicatrices en el cuerpo. De no ser comprendido en mis posiciones, que se interpretara que había alguna doblez en lo que estaba proponiendo, cuando no es mi característica. Mi característica es más de franqueza, de ir de frente, lo que me ha causado muchos problemas pero no frustraciones. De que el sistema nunca terminara de cerrar en algún punto… o que cuando se han obtenido logros después se retrocede, por todo el entorno socioeconómico del país. Me he sentido frustrado a veces con algunas personas que he conocido del entorno del trabajo, de la especialidad, de los colegios, de los consejos… que uno los veía como líderes de un proceso de evolución y terminaron traicionando todo lo logrado, y dando vuelta todo hacia atrás, regresando a épocas terribles.
Me he sentido frustrado con el nivel de estudios en la Universidad. Uno va con esa ilusión a la Universidad que se va a formar y va a salir “preparado para”. Yo creo que sale preparado para… para seguir luchando, en la formación personal, profesional, política, ideológica, el estudio de los sistemas sanitarios… La frustración es que uno creía que se recibía y era médico.
Médico de título. Médico no se termina de ser nunca. Hasta que uno abandone esta tarea.
Esas son frustraciones… fundamentalmente lo que yo llamo las traiciones. No las traiciones políticas. La política lleva en sí misma la traición, además sistematizada desde Maquiabelo. Hasta hay tratados para traicionar. Lo que mas me ha frustrado y me ha puesto muy mal, han sido las traiciones ideológicas, que no son patrimonio de nadie en política y son patrimonio de todos los sectores políticos. Esas sí me han marcado, me han marcado muy fuerte.
¿Por qué acepta el cargo de Director del Hospital Colonia Santa María?
Lo acepto porque me parece que es un momento en el que hay como una necesidad de la institución de varias cosas. Una es que esta institución tenga un director que sea de la institución.
Este hospital lleva años que no tiene (salvo un episodio menor de alguien que tuvo que asumir apresuradamente la dirección y que se fue apresuradamente) un director que sea de la institución. Y a pesar de que yo no estaba acá me siento parte de la institución. La idea es que la gente se prepare para ser director del hospital y que haga su recorrido muy cerca de la gestión de la dirección. Yo espero que uno de los logros sea que el Director sea de la institución. Y cuando digo sea, no digo solamente que trabaje en la institución, sino que tenga la camiseta, como se dice vulgarmente, puesta de la institución.
Por ejemplo, yo he destituido todos los cargos internos de la institución de jefe de servicio, a todas las personas que no vienen a trabajar todos los días. Los que vienen dos veces o tres veces por semana y trabajan en otro lado… No. No. Acá las personas que se hacen cargo de los servicios tienen que ser personas que estén acá de lunes a viernes. En eso soy implacable. Porque uno no puede dirigir una institución viniendo tres veces por semana, ni un servicio, ni nada… Uno para dirigir un servicio tiene que estar. Bueno eso. Básicamente que esté.
¿Cómo ve la psiquiatría actual?
La psiquiatría actual se mueve en un maremagno que por momentos pareciera que toma determinadas direcciones, por momentos otras y no termina de hacer la síntesis que a mi entender ya está hecha. Lo que pasa que hay gente que por distintas razones, políticas, de escuela, de financiamiento de laboratorio, no termina de aceptarla porque pierde su quinta personal. En vez de tener un territorio comunitario para todos… prefieren tener una quintita aunque sea de dos hectáreas.
Cada vez se acota más el lugar del hospital psiquiátrico…
Salvo que esta justificación de la criminalización de la locura y la locura de la criminalidad, queden confundidas, igual que en el origen de la psiquiatría.
La psiquiatría surge como una diferenciación de la locura con el criminal y estamos exactamente en el mismo punto de donde arrancamos hace 300 años. Solo que con mucho más conocimientos y muchas más posibilidades de debatir sobre esto. Pero socialmente estamos en el mismo lugar, los criminales y los locos amontonados en… la prefectura de París.
¿Qué pasó con la Salud Pública Provincial?
Yo creo que hubo procesos políticos muy destructivos en Córdoba, del sistema de salud, que no solo afectaron a este hospital; afectaron a todos los hospitales. Algunos se pueden haber rehabilitado más o menos mejor… otros se quedaron estancados… Otros como en éste, tal vez no se haya hecho lo que se debería haber hecho con el personal del hospital. Hacer que ocupen el lugar que alguna vez ocuparon.
Hoy es un problema encargarle un trabajo a alguien… porque primero dice que no, después dice que no puede, después dice que no sabe, y por último termina diciendo que realmente no le interesa porque no tienen ninguna expectativa. La idea es que la gente vuelva a tener expectativas pero que… luche para esas expectativas. No para que le compremos el helado que quiere tomar.
Que aprenda a fabricarse sus propias expectativas, que aprenda a juntarse, con sus compañeros… Esto es muy fácil. O nos juntamos o terminamos de perder el hospital, porque así es muy fácil hacerlo pedazos al hospital.
Yo creo que ha habido estrategias explícitas y estrategias solapadas para hacerlo desaparecer al hospital. Explícitas y solapadas. La estrategia de ésta gestión es, primero, que no desaparezca y segundo hacerlo mejor. Pero junto con la gente. Sólo, no lo voy a poder hacer… Hacerlo con la gente me produce un grado de regocijo y de entusiasmo, que yo digo, que no termine rápido la gestión, pero no por ser el director, a mi esto ya no me da currículo ni nada. Es más, en vez de fumar 20 cigarrillos como fumaba donde estaba trabajando, fumo cuarenta. No, no. A mí lo que me motiva es ver que la gente se arriesga porque siente el respaldo.
Que no es una cosa de palabra que yo los respaldo, siente el respaldo concreto, sino nadie se arriesga. Nadie desde el trabajo en la trinchera se arriesga a salir por una propuesta de alguien que lo está dirigiendo por teléfono a dos mil kilómetros de distancia. Acá se dirige junto con la gente, se planifica junto con la gente, se arriesga junto con la gente, y esto está dando muchos resultados en general. Hay gente que no le interesa, que no se va a poner nunca la camiseta, pero eso sucede en cualquier institución. El concepto mío es que yo trabajo con los que trabajan… el que no trabaja…
¿Cuáles son las grandes dificultades del aparato público?
El aparato público tiene grandes dificultades y ni sueñen que les voy a decir que es por lo económico, por lo presupuestario…
Los grandes problemas de la administración pública es que deja ir los mejores y se queda siempre con lo peor… y ¿quién se queda? Se queda el que no hace nada, que nadie lo ve, no se sabe dónde está. Ese queda y después hay que entregarle una medalla a los treinta años.
A mí me preocupa muchísimo más que alguien tenga la medalla que no la tenga…
Me preocupan también las medallas de quienes se hacen una cena (como ocurrió con algunos directores de Salud Mental de otras gestiones) que se hicieron una cena para entregarse una medalla a sí mismos…Esas me preocupan mucho. Yo las medallas que tengo son deportivas. No tengo ninguna profesional. Ni me la van a dar nunca, cosa que me enorgullece, no lo digo con pena o como una frustración de la que hablamos hace un rato.
¿Cuál es la Salud Pública que sueña para sus hijos y nietos?
Muy sencilla. Primero que fueran asistidos por el estado. Desde la concepción hasta la muerte. Nada más ni nada menos. Esa es la salud pública que yo quisiera.
Que es la Salud Pública que la Argentina tuvo todas las posibilidades de tener. El nivel de la medicina en las instituciones públicas llegó a ser brillante.
La institución como lugar de investigación, de experimentación, de formación personal… Es decir la institución pública llegó a ser el paradigma yo creo, de lo que debía ser la Salud Pública, y siempre se la elogió mucho, y nunca se tomó el modelo para aplicarlo. Nos llenamos de orgullo repitiendo esto y la realidad es que hemos quedado reducidos a la nada.
La historia de la Salud Pública, si a ustedes les gusta las novelas de terror la pueden revisar en cualquier texto… es una novela de terror. Realmente es una novela de terror.
¿Cuál es su visión sobre la gestión de un director?
Se puede dirigir el hospital sin ningún apoyo, dejar todo como está, venir tres veces por semana un rato, firmar alguna cosa… Hay muchas formas de dirigir. Yo he elegido venir y estar, creo que es el último trabajo que voy a hacer en salud.
¿Cuáles son las necesidades de la institución?
Una conducción que sea fundamentalmente honesta. Que sepa reconocer los errores que comete y dar marcha atrás, escuchar cuando uno se está equivocando por dónde va. Una persona que inspire confianza en la gente… no que sea bueno. Las personas que conducen no son ni buenas ni malas, conducen. Toman medidas, y esas medidas deben ser a favor de la institución; no a favor de fulano o de mengano, o en contra de sultano o merengano. Necesita que la gente termine de ponerse la camiseta.
Yo proyectos para el hospital… todo. Todo lo que sea aportes, ideas, lo recibo, escucho, lo metabolizo, lo discuto con la gente y después tomamos una decisión. Esto yo solo no lo arreglo, si no es con la colaboración del personal, no lo arreglo. Lo dejo como está, total si otros pasaron y no lo arreglaron yo también puedo pasar. Ahora, si yo gano esto de que la gente sienta de que es para ellos… ya les llevo una ventaja a los demás.
¿Mas o menos se entiende cuál es la filosofía? Es la participación, la participación. Y compartir la decisión, Más allá de que la última es mía y de la cual me tengo que hacer responsable. Pero compartirla con la gente, no tomar decisiones a tontas y a locas.
Y que se entienda que nunca, (salvo que me esté saliendo algo mal que vaya en contra del hospital) si ellos me lo señalan yo doy marcha atrás inmediatamente porque me puede pasar.
¿Cuál es su resumen Doctor?
La realidad es ésta. No la acepto… no digo resignadamente es esta. Digo es esta y ahora veamos cómo la cambiamos.
No me voy a sentar sobre la realidad tranquilo porque yo no la inventé. No, no. Yo me siento y me están picando y pinchando las espinas, por eso trato de cambiarla… esa es la gestión digamos, no es otra.
Agradecemos al Dr. José Luis Fitó, su presencia. Al Dr. Cesar Braín, al Dr. Ariel Gómez, al Dr. Jorge Casco y a los colegas de la Guardia de los Días Martes del Hospital Domingo Funes, por su colaboración incondicional.
Al Sr. Director Fernando Fontanarrosa por darnos la autorización oficial.
2) Premio Deuda Interna 2007 al Dr. José Luis Fitó.
EL Dr. José Luis Fitó nos concedió una entrevista en el año 2006 como Director del Hospital Psiquiátrico Colonia Santa María de la Provincia de Córdoba, República Argentina, en el marco de un documental destinado a difundir la cruda realidad de esa institución.
Su destacada trayectoria como psiquiatra local y su comprometida actuación en la función pública hicieron de esa charla casi informal un testimonio fundamental para la comprensión de la problemática actual en este campo específico de la ciencia.
Es para la Fundación Deuda Interna un grandísimo orgullo entregar el Premio Deuda Interna 2007 homenajeando el esfuerzo y el pensamiento de un colega que ha sido coherente en su accionar, que trabaja a diario en el anonimato para construir desde la ruina un país más equitativo, y que está cambiando la historia del hospital que lo viera crecer como un joven residente.
Consideramos que es este un material sumamente útil para generar discusión y debate no sólo a nivel académico sino también comunitario.
La psiquiatría actual, la función pública, la problemática del estado, sus sueños como médico y sus deseos para el futuro, son algunos de los pasajes de esta entrevista.
En ella, está reflejado el pensamiento de un hombre que a nuestro entender, debe ser considerado un ejemplo de lucha por la justicia y la igualdad en nuestro país. La entrega se realizó a las 21hs del día martes 27 de noviembre de 2007.
Agradecemos al Dr. José Luis Fitó, su presencia. Al Dr. Cesar Braín, al Dr. Ariel Gómez, al Dr. Jorge Casco y a los colegas de la Guardia de los Días Martes del Hospital Domingo Funes, por su colaboración incondicional.
Al Sr. Director Fernando Fontanarrosa por darnos la autorización oficial.
Mariano Emilio Iosa
Presidente Fundación Deuda Interna
Usted puede acceder a ver un resumen de éste video en la sección de Producción documental de la Fundación Deuda Interna http://www.deudainterna.org/
3) Dominguito y Domingazo
( la tira tragicómica de un sistema de salud de gente seria)